
Discípulos 24/7: 1. Evangelio integral
Anthony Billington
Cuán hermosos son sobre los montes los pies del que trae alegres nuevas, del que anuncia la paz, del que trae nuevas del bien, del que publica salvación, del que dice a Sion:
¡Tu Dios reina!
Isaías 52:7
Después que Juan fue encarcelado, Jesús vino a Galilea predicando el evangelio del reino de Dios, diciendo: El tiempo se ha cumplido, y el reino de Dios se ha acercado; arrepentíos, y creed en el evangelio.
Marcos 1:14–15
Muchas religiones empiezan diciéndole a la gente lo que debe hacer; el Cristianismo empieza con lo que Dios ha hecho. De esto, justamente, es de lo que trata el evangelio, no es un conjunto de instrucciones o buenos consejos, sino las buenas noticias sobre lo que Dios mismo ha realizado, por nosotros y para el mundo, en Cristo.
En el Imperio Romano del primer siglo, los heraldos propagaban las “buenas noticias” de las victorias militares o la de un emperador que subía al trono. Pero para los cristianos, la palabra “evangelio” también venía cargada con las promesas de salvación del Antiguo Testamento. Isaías, en particular, declara las “nuevas del bien” (o “buenas nuevas”) de Dios viniendo con poder, reinando, salvando a su gente y estableciendo la paz. Ciertamente, los últimos capítulos de su profecía describen cómo el reino de Dios será de alcance universal, abarcando a todas las naciones, incluso renovando todo el cosmos. No es de extrañar que se describa como ¡“buenas noticias”!
Es desde esta perspectiva que Marcos describe a Jesús predicando las “buenas noticias” de la llegada del reino de Dios —como la culminación de una historia que se remonta a los pactos de Dios con su pueblo—. Pero a medida que la narración avanza, mientras Jesús camina por la senda que le lleva a su muerte y resurrección, se hace evidente que la salvación prometida sucederá por medio del siervo prometido por Isaías que sufriría y moriría en lugar de otros. El reino y la cruz están unidos entre sí en el evangelio.
Amenudo es una tentación reducir el evangelio a una transacción personal entre yo y Dios en la cual Jesús muere por mí, yo me arrepiento y Dios perdona mi pecado. Desde luego, el evangelio no es menos que esto, pero es mucho más: implica no solo el rescate de hombres y mujeres del juicio, sino también la renovación de la relación de Dios con su pueblo y larestauración de la creación. Las buenas noticias de lo que Dios ha hecho en Jesús conllevan implicaciones de lentes de aumento para la redención individual de los pecadores e implicaciones de gran angular para la reconciliación de todas las cosas.
Viéndolo así, un compromiso con el evangelio es significativo para toda la vida. En casa y en el trabajo, en la galería de arte y en el campo de deporte, en los negocios y en la política, paseando el perro y lavando los platos; no hay ningún lugar donde el evangelio no alcance con sus implicaciones debido a la naturaleza exhaustiva de la obra salvadora de Dios en Cristo, su reinado en cada uno de los ámbitos de la vida.
Today’s Word for the Week es parte de una mini-serie que reflexiona sobre los siete temas del recurso del LICC, Discípulos 24/7, escrito para la Convención de Keswick 2015. www.licc.org.uk
En los siguientes enlaces puedes ir al resto de artículos de la serie Discípulos 24/7 y si deseas adquirir el libro clica aquí
1. Evangelio integral
© 2015 «Anthony BIllington, © 2015 «LICC» © 2016 porfineslunes.org. Usado con permiso Permiso: Permitimos y animamos a reproducir y distribuir este material ya sea de forma completa o parcial tanto como se desee, siempre y cuando no sea cobrando o solicitando donativo alguno por ello, más que el coste de reproducción. Para uso en internet, por favor, usar únicamente a través del link de esta página. Cualquier excepción a lo anterior debe ser consultada y aprobada por porfineslunes.org. Contacto:info@porfineslunes.org