Trabajo es alabanza

Cuando el domingo acaba, la mayoría volvemos a nuestros trabajos fuera de la iglesia, pero nuestra misión no ha quedado suspendida hasta el domingo siguiente, sino que sigue, porque está en el mundo laboral. Cuando hacemos el trabajo con excelencia, integridad y diligencia estamos ofreciendo a nuestros colegas una oportunidad de conocer a Dios y hacemos de nuestro trabajo un acto de alabanza.

Foto de enlace krakenimages on Unsplash